El Ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya, firmó un convenio de financiamiento retroactivo por $100 millones con el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), institución del Grupo Banco Mundial por medio de su nueva representante en El Salvador, Carine Clert.
Con esta operación, el BIRF reconoce los gastos hechos por el Gobierno en la adquisición de vacunas COVID-19, insumos médicos e inversión en el sistema de salud.
Instituciones como el Fondo Mundial Internacional (FMI) y la Organización Mundial para la Salud (OMS) han reconocido que El Salvador es uno de los países del mundo destacados por su excelente manejo de la pandemia, además de su ejemplar y temprano plan de vacunación.
El Salvador y el Banco Mundial han fortalecido su alianza estratégica, por medio de aprobaciones para proyectos que están saldando deudas históricas en todos los sectores del país y que anteriormente se encontraban en un estado de parálisis política.
El Gobierno del Presidente Nayib Bukele ha gestionado de forma ágil la adquisición continua de vacunas para combatir el COVID-19, siendo de los países de la región con un ritmo más acelerado, aplicando alrededor de 11 millones de dosis en todo el territorio nacional. De esta forma se ha priorizado la vida de los salvadoreños, invirtiendo sus impuestos en la renovación del sistema de salud.